Pacto de convivencia
En los siglos XII y XIII se fundan la mayoría de las ciudades medievales gallegas. Los vasallos de Celanova huyen entonces hacia Allariz, Ribadavia y Ourense. Se constituyen en estas nuevas ciudades comunidades judías que comienzan a tener problemas con la mayoría cristiana a finales del siglo XIII. La resolución ejemplar, a través del diálogo, del conflicto interétnico en Allariz ilustra por qué en la Galicia medieval el antisemitismo popular y el anticristianismo judío no terminaron en masacres, como en otros lugares a lo largo de la Edad Media.
Pacto con el Judío Mayor
El 20 de mayo de 1289, el Concello de Allariz, estando presentes el representante del Rey y los párrocos del pueblo, llega a un acuerdo con el Judío Mayor, Isaac Ismael, para regular la convivencia, rota por los agravios mutuos durante las procesiones. Pactan respetarse mutuamente las fiestas religiosas de cada comunidad, así como vivir en armonía cada una de ellas en su parte del pueblo.